[Viviana]

El Aprendizaje-Servicio (A+S) es una metodología que efectivamente construye impactos positivos en los procesos formativos, ya que promueve la conexión entre la teoría y la práctica, lo que facilita la comprensión y la aplicación de los conocimientos adquiridos en contextos reales. En este sentido, el A+S se convierte en una herramienta poderosa para que los docentes puedan innovar en sus enfoques pedagógicos y fomentar una relación más estrecha entre los contenidos académicos y las realidades concretas que enfrentan las comunidades.

Para los estudiantes, esta metodología no solo potencia el aprendizaje significativo, sino que también les permite desarrollar habilidades blandas esenciales como la empatía, la comunicación, el trabajo en equipo, la gestión del tiempo y la capacidad de resolver problemas. Además, el A+S fomenta una ética responsable, crítica y ciudadana, ya que les permite involucrarse directamente en proyectos sociales que tienen un impacto real en la comunidad.

En cuanto al diálogo horizontal entre la universidad y el territorio, este enfoque promueve un intercambio enriquecedor entre el saber técnico de los estudiantes y el saber popular de las comunidades. Este diálogo de “deberes” no solo es una forma de aprendizaje mutuo, sino que también ayuda a construir vínculos sostenibles entre ambos, con la finalidad de generar un impacto social positivo y transformar las realidades de las comunidades desde una visión crítica y comprometida. De esta manera, el A+S contribuye a la formación de profesionales más sensibles, conscientes de las problemáticas sociales y dispuestos a participar activamente en la transformación de su entorno.